¿Cómo obtiene financiación una empresa?
La financiación es parte fundamental para el desarrollo de una empresa. De hecho, es inherente a la misma puesto que dentro de la propia definición de empresa se encuentra la parte financiera en todas y cada una de sus vertientes, y recaudar fondos es una de ellas.
Obtener ingresos para sacar adelante el proyecto empresarial ha sido, históricamente, el mayor problema para todo emprendedor. Sin embargo, en la actualidad existen cada vez más opciones de financiación para recabar todo el dinero necesario para la puesta en marcha de la empresa.
Índice
Herramientas de financiación
Existen una gran variedad de vías de financiación. En las siguientes líneas vamos a hacer una enumeración de cada una de ellas y las explicaremos brevemente:
- Fondos propios: A la hora de poner en marcha un proyecto emprendedor, y si vamos a solicitarle dinero a otros agentes del ecosistema, deberemos apostar nuestro patrimonio para ofrecer una imagen de convicción en nuestra idea y proporcionar confianza a posibles inversores. Además, al tener parte de nuestro capital en juego, la implicación será mucho mayor.
- Cofundadores: Si en nuestro proyecto empresarial tenemos socios, éstos deberán implicarse en la parte empresarial poniendo fondos. Es otra manera de garantizar la financiación en los inicios del proyecto.
- Friends, family and fools: Traducido del inglés como «amigos, familia e incautos» que se atreven a invertir en el proyecto. Tiene como ventaja la obtención del dinero en el entorno cercano así como la transmisión de seguridad a nuevos inversores pero el inconveniente de tener que implicar, precisamente, a familia o amigos.
- Crowdfunding: Es una herramienta moderna de financiación masiva en la cual muchos usuarios pueden estar dispuestos a hacer pequeñas aportaciones. Estas pueden ser por incentivos o donaciones o directamente pueden entrar a formar parte del capital social de nuestra empresa.
- Financiación bancaria: El principal escollo a la hora de comenzar un proyecto emprendedor ya que prácticamente ningún banco va a poner a nuestra disposición dinero salvo que avalemos con nuestro patrimonio personal el préstamo.
- Business Angels: Personas físicas poseedoras de un capital listo para invertir y que están en búsqueda de un proyecto de emprendimiento en el que ir metiendo pequeñas cantidades dentro del capital social. Generalmente esta figura también se implica en otras facetas del negocio como en la gestión o el contacto con proveedores. Es preciso elegir el Business Angel adecuado.
- Capital Riesgo: Empresas que se dedican a invertir dinero en ideas emprendedoras con crecimientos rápidos y arriesgados pero también con una gran capacidad de reportar beneficios. Existen dos tipos de fondos de capital riesgo:
- Private Equity: Busca proyectos más consolidados y con indicadores que hablen de la solvencia de los mismos.
- Venture Capital: Entran en las fases más iniciales de los proyectos. Aunque haya un gran riesgo, apoyan ideas escalables y que les aporten un elevado dividendo cuando salgan de la empresa.
Cómo saber si hemos acertado con la vía de financiación
A la hora de tener éxito eligiendo el canal adecuado para obtener financiación, es necesario conocer una serie de «trucos» que harán este proceso más sencillo.
En primer lugar, adapta el mensaje al perfil de inversor que quieres captar puesto que no es el mismo mensaje el que se le transmite a un familiar, amigo o cosocio que el que se le comunica a un Business Angel ya que, en muchos casos, buscará sinergias con otros negocios así como obtener una rentabilidad financiera. Por lo tanto, hay que aclararle lo máximo posible cuáles son las metas que va a lograr invirtiendo en nuestro negocio.
También hay que saber elegir el tipo de financiación adecuada para cada fase. Es posible trabajar con cada herramienta de financiación que ofrece el mercado pero cada una en el momento apropiado. Por ejemplo, no es recomendable empezar a pedir financiación a través de un fondo de capital riesgo si nosotros no hemos sido capaces de apostar nuestro propio capital en una primera instancia.
Elegir bien a los inversores. Lo que parece una nimiedad porque, a priori, cualquiera puede servir. Pero no es así ya que deberemos seleccionar de forma precisa entre la gran variedad de oferta de inversores para que nuestro proyecto coja la forma que deseamos.
Empezar apostando tu mismo es un requisito indispensable porque tienes que lanzar un mensaje de confianza en lo que tú mismo quieres desarrollar.
Finalmente, piensa a lo grande, empieza pequeño y crece rápido. Estos tres últimos pasos son necesarios para tener clara cuál es la financiación que vas a necesitar en cada momento. Aspirar a cotas altas para planificarlo en nuestro plan financiero y, con los fondos previstos, crecer velozmente porque poniendo el modelo de negocio en marcha rápido, parte de la financiación llegará de nuestros propios resultados.
Vídeo
Como hemos podido ver, iniciar una idea emprendedora requiere de constante financiación y, en función de la fase en la que se encuentre el proyecto, necesitará de un tipo de inversor específico. Elegir adecuadamente a este inversor, ya no solo el tipo, sino también en cuanto a una serie de cualidades personales, reportará grandes beneficios para el desarrollo de tu proyecto.
No olvidéis que, como siempre, hemos preparado un vídeo para hablar sobre este tema de los inversores más en profundidad por lo tanto, si te has quedado con alguna duda, ¡visita nuestro canal!